Unos padres seguros y sanos son imprescindibles para criar a unos niños seguros y sanos. CORA (Community Overcoming Relationship Abuse) es el único proveedor del condado de San Mateo de servicios integrales de prevención del abuso en la pareja. Esta organización es el resultado de la fusión en 2003 entre el Centro de Prevención de la Violencia Doméstica y los Servicios Sor Juana Inés para Mujeres Maltratadas. CORA puede apoyar a las madres y a los niños cuando más lo necesitan, y estamos muy contentos de que CORA les haya ayudado a compartir sus historias:
Karla y Jason
Karla y su hijo pequeño, Jason, acudieron a CORA el año pasado después de que su padre se mudara de casa. Karla había sufrido abusos verbales y psicológicos durante su matrimonio y después de separarse.
Karla estaba especialmente preocupada por el impacto que habían tenido en su hijo las discusiones verbales de las que había sido testigo, además de cómo estaba procesando la marcha de su padre de su casa. A través del programa Los 5 primeros de CORA, participaron en 6 meses de terapia diádica. Durante este tratamiento, experimentaron un tiempo individual protegido juntos y colaboraron en actividades de sintonía que reforzaron su vínculo.
Karla tuvo un espacio individual con el terapeuta para procesar su propia experiencia emocional, para poder separar sus sentimientos de los de su hijo y estar más presente en lo que él estaba viviendo. El clínico enseñó a Karla a estar más disponible para las emociones de su hijo y a ser más capaz de reflejarle sus sentimientos para que se sintiera reconocido y validado.
El clínico trabajó con Jason para construir su vocabulario de emociones, de modo que se volviera más hábil para reconocer sus propios sentimientos y expresarlos a su madre. A continuación, el mismo clínico trabajó con Karla para ayudarla a crear una historia utilizando los personajes televisivos favoritos de su hijo que reflejaba su propia experiencia familiar, y facilitó el compartir esta historia con su hijo a través de sus juguetes. Jason fue capaz de entender, participar en la historia de su madre y añadirle algo; esta fue una forma en la que madre e hijo procesaron juntos y de forma segura las experiencias traumáticas de su familia. El clínico utilizó la terapia de juego a lo largo del tratamiento para permitir a Jason la oportunidad de expresarse a través del juego y apoyaron y ayudaron a Karla a presenciar y participar en el juego y el proceso de su hijo.
El clínico proporcionó a Karla psicoeducación durante todo el proceso y la instruyó en una práctica llamada «Servir y devolver», centrada en el juego y la sintonía con el niño. En las etapas finales de la terapia, el clínico le proporcionó ideas y apoyo para ayudar a Karla a tranquilizar a su hijo de que seguirá teniendo tiempo con papá y mamá. Karla pudo hacer a Jason un calendario en su habitación para ayudarle a ver qué días podría visitar a su padre. Además, el clínico proporcionó técnicas para ayudar a Karla a apoyar a su hijo durante la transición de un padre a otro.
Karla se siente más segura de sí misma en la crianza de sus hijos y en la asistencia a Jason cuando éste se desenvuelve con sus padres viviendo en hogares diferentes. Karla también informa de que Jason ha aumentado su capacidad para compartir y hablar sobre cómo se siente y que esto ha hecho que se sientan más conectados y en sintonía el uno con el otro.
Jennifer, Mateo y Christian
Jennifer, una hispana de 37 años, madre de dos niños, Mateo de 4 años y Christian de 12, lleva un año y medio recibiendo una serie de servicios en CORA. Jennifer ha completado un tratamiento de terapia individual, en el que participó en una planificación de seguridad continua, procesó sus experiencias de violencia doméstica, aprendió a manejar sus desencadenantes y el estrés, y disminuyó significativamente sus síntomas de TEPT. Jennifer y Mateo también participaron en nuestro Grupo Diádico de los Primeros 5 de habla hispana, donde reforzaron su apego y comunicación permitiendo a Mateo expresar sus sentimientos y pensamientos abiertamente con su madre. Además, tanto la madre como el hijo pudieron crear una nueva narrativa familiar de cara al futuro. Christian está en nuestro Grupo de Chicos Adolescentes, donde trabaja en las habilidades sociales y en el procesamiento de sus factores de estrés.
Ahora Jennifer forma parte del Grupo de Apoyo a la Salud Mental de CORA, donde puede conectar con otros padres supervivientes. El grupo es también una fuente de fuerza y apoyo para otros miembros. Jennifer recibió la gestión de casos a través de nuestro programa First 5 San Mateo County para acceder a recursos para sus hijos y para ella misma. También accedió a los servicios jurídicos de CORA para preparar sus audiencias en el tribunal de familia.
Jennifer y sus dos hijos también se han unido a nosotros en muchos de nuestros eventos de compromiso familiar de los Primeros 5. Después de un año y medio como parte de nuestra comunidad CORA, Jennifer está ahora en una relación sana y ha expresado sentir una felicidad que no esperaba volver a sentir después de su último matrimonio. Gracias a todos los servicios que ha recibido Jennifer, ahora puede sentirse segura para ella y su familia.
Los valores y la visión de CORA reconocen la conexión entre la opresión social e institucional (incluyendo el sexismo, el racismo y el heterosexismo) y la violencia, incluyendo el abuso de la pareja. Y reconocen que el maltrato de la pareja es el resultado de las creencias y normas sociales y se perpetúa por ellas. Su amplio espectro de servicios aborda la naturaleza intergeneracional de la violencia y el objetivo de crear una comunidad en la que las parejas íntimas se traten con respeto mutuo, compasión e integridad. Si necesita ayuda, o tiene curiosidad por lo que hace este socio, visite su sitio web y eche un vistazo.
